
La labor de coordinación del mantenedor y de la limpieza han de ser claves para una buena convivencia
Muchas son las comunidades de vecinos y propietarios que cuentan con un locales comunitarios. La mayoría de veces se usa para celebraciones, reuniones, cumpleaños y otro tipo de encuentros similares. Esto ayuda mucho a la organización de este tipo de eventos en las familias, que no tienen que irse fuera de su comunidad para reunir a amigos y familiares, y que abarata mucho los costes de este tipo de actos. Pero es necesario, y mucho más en comunidades de grandes dimensiones, una correcta coordinación; donde la figura del conserje o mantenedor es fundamental, para que todo funcione de forma adecuada.
En primer lugar para las reservas. El mantenedor es una figura que tiene un contacto cercano con los vecinos y personas que pasan por la comunidad. Suele conocer a vecinos y saber de sus necesidades. Es el punto de conexión con la presidencia y la administración, y para anunciar a otros vecinos si una reserva de local está ya formalizada. Servihogar promueve la figura del mantenedor en sus planes de mantenimiento en comunidades y esta es una de las nuevas labores atribuidas a este puesto a raíz de la existencia de estos locales comunitarios.
Para facilitar la llave también, enseñar el local para aquellas personas interesadas y, sobre todo; muy importante, ver en el estado en el que se encuentra antes de la reserva, el mantenedor cumple un rol importante de conexión entre los vecinos. También suele publicar en los tablones de anuncio si la reserva ya está formalizada, para que todos los vecinos vean qué días están libres. Estos locales también son espacios comunes y parte de la comunidad, con lo que han de estar en los planes de limpieza, mantenimiento y pequeños arreglos a los que han de estar atentos siempre estos profesionales.

Limpieza y supervisión
La importancia de las revisiones previas y posteriores a la reserva se debe a poder establecer con más rigor cuándo se han producido daños o suciedades fuera de lo normal, y poder hablar con los usuarios en cuestión. Independientemente de eso, Servihogar recomienda que estos locales deben estar en los planes periódicos de limpieza como el resto de zonas comunes. De hecho atribuye esa labor a sus mantenedores, y así lo agradecen vecinos, presidentes de comunidad y administradores.
Estos locales son puntos de encuentro entre vecinos y amigos, como así también lo es el personal que, diaria o periódicamente, vela por un buen funcionamiento de las comunidades. Y este aspecto de los locales comunitarios, que son muy beneficiosos y prácticos, es fácil que cree problemas entre vecinos si no se establecen estas sencillas normas de convivencia y funcionamiento. Servihogar también trata que su personal y sus planes consensuados de acción en las comunidades también sean nexo de unión entre vecinos para que la satisfacción sea máxima entre ellos.